Ericsson y Volvo Cars alardean de un éxito crucial en la incorporación de conectividad 5G a vehículos, tras una prueba en la que varios coches han podido alternar entre distintas redes compatibles.

Se ha realizado una prueba en un circuito de carreras sueco en la que los vehículos han alternado entre conexiones a dos redes 5G distintas. Se ha usado tecnología 5G para proporcionar mapas actualizados en alta definición a los conductores, y computación edge para retransmitirles información contextual sobre el destino y el entorno del vehículo.

El paso de una red a otra podría ser clave para hacer posible la conectividad transfronteriza de los vehículos. Se entiende que esta sería fundamental para el éxito y la seguridad de la 5G en la industria mundial de automoción.

Mikael Prytz, director de investigación de Ericsson en el área de Negocio de Redes, explica que “cuando se comparte un mapa actualizado con otros coches, los niveles de latencia son importantes, y se necesita un elevado rendimiento tanto en la red que se utilice en cada caso como en la cooperación entre varias redes”.

Ericsson añade que los vehículos 5G solo harán realidad su potencial si los coches autónomos y conectados se comportan como clústers, y no como unidades aisladas.

La prueba que Ericsson ha realizado con Volvo forma parte de 5GCroCo, un proyecto financiado por la Unión Europea para probar la tecnología 5G en un corredor que conecta Francia, Alemania y Luxemburgo.

Ericsson también participa activamente en la 5G Automotive Association y en el Automotive Edge Computing Consortium, una asociación interindustrial que trabaja en la construcción del ecosistema del coche conectado.