Un grupo de firmas de automoción, telecomunicaciones y tecnología ha anunciado planes para llevar a cabo las primeras pruebas de tecnología C-V2X (comunicación celular entre vehículo y todo lo demás) en Japón, con el objetivo de demostrar las mejoras en el alcance, la fiabilidad y la latencia de las comunicaciones directas que utilizan la banda de 5 GHz.

En un comunicado conjunto, las seis empresas -Continental, Ericsson, Nissan, NTT Docomo, OKI y Qualcomm- indican que el objetivo consiste en validar los beneficios de la C-V2X mediante la tecnología de comunicación directa definida por 3GPP en la versión 14 de sus especificaciones. Las pruebas también están concebidas para mostrar los beneficios complementarios de las comunicaciones mediante redes LTE-Advanced.

Continental llevará a cabo las pruebas con el diseño de referencia de Qualcomm para C-V2X, que utiliza su chipset 9150 C-V2X con capacidad integrada GNSS (Global Navigation Satellite System, Sistema de Satélites de Navegación Mundial) con el fin de construir sistemas para coches conectados e integrarlos en los vehículos de Nissan.

Mejoras en seguridad

Nakul Duggal, vicepresidente de gestión de productos de Qualcomm, afirma que C-V2X, con sus

capacidades de comunicación directa, debería constituir un factor importante en la mejora de la seguridad y la asistencia al conductor.

Explica que “la prueba realizada en Japón es un hito en la implantación global de la tecnología C-V2X, que debería emplearse en los vehículos comerciales hacia el 2020”.

Tetsuo Sasaki, director general del departamento de coches conectados e ingeniería de servicios de Nissan, explica que los datos que se han obtenido mediante la prueba en mundo real permitirán que el fabricante de automóviles acelere su desarrollo y ofrezca nuevos servicios dentro de un calendario adecuado en cuanto la tecnología 5G esté disponible.

Erik Ekudden, director de tecnología de Ericsson, explica que “la solución C-V2X es única, en tanto que ofrece comunicación directa y en red para los servicios V2X. Gracias a las comunicaciones con base en red, cabe la posibilidad de ofrecer servicios de seguridad y eficiencia en el tráfico mediante la cobertura y la penetración ya existentes de smartphones y modems celulares. También proporciona conectividad a varios servicios con base en nubes, con lo que facilita una gama de aplicaciones y servicios de valor añadido.”

En noviembre, Qualcomm se alió con Nokia, Ford y AT&T en los Estados Unidos para probar la tecnología C-V2X.

Ericsson y Docomo también son miembros del Automotive Edge Computing Consortium, creado en agosto. Dicho grupo trabaja en la creación de arquitecturas de redes para tratar el diluvio de datos que generarán los coches conectados. Algunos de sus miembros son Intel, NTT y Toyota.