Javier Polo (en la foto, abajo), consejero delegado de la empresa incipiente europea  PlayGiga, habla con Mobile World Live sobre los beneficios que las operadoras pueden obtener mediante inversiones en juegos alojados en la nube.

¿Por qué deberían invertir las operadoras en juegos alojados en la nube?

Javier Polo (JP): Hay varias razones. Los juegos alojados en nubes son una herramienta de captación de clientes. Es la primera oportunidad que tienen las operadoras desde hace bastante tiempo para ofrecer una categoría totalmente nueva de servicios digitales a sus suscriptores. Los juegos alojados en la nube ampliarán su cartera de productos de ocio y, si se hallan entre los primeros en adoptarlos, serán un diferenciador clave de su oferta.

También son una herramienta para aumentar las ventas. La posibilidad de disfrutar de juegos de alta gama en un televisor o PC es una buena razón para que los clientes con conexiones ADSL o de cable se pasen a conexiones prémium.

Los juegos en la nube también pueden ser una herramienta de retención. Si se incluyen en las tarifas de primer nivel, junto con la conectividad y las suscripciones a televisión de pago, promueven la lealtad del cliente y reducen el abandono.

Por último, incrementan el promedio de ingresos por usuario y agregan valor mediante el decodificador, ya que el lanzamiento de un servicio de juegos en streaming suele asociarse a la distribución de una nueva generación de decodificadores por parte de la operadora.

Ahora que las operadoras van a invertir fuertes sumas de dinero en redes 5G, los juegos en la nube son un caso de uso perfecto. Aunque abunden las aplicaciones B2B para la nueva tecnología, no podemos decir lo mismo de los servicios B2C. Los juegos alojados en la nube podrían ser la primera aplicación de gran éxito en redes 5G, tanto en hogares conectados como en dispositivos móviles.

Con la 5G, las operadoras tienen una primera oportunidad de convertirse de verdad en un canal importante para la distribución de juegos. Ya cuentan con audiencias familiares cautivas, más amplias que las de los juegos tradicionales para consola y PC. Disponen de las infraestructuras necesarias y también de experiencia en la venta de servicios a gran escala.

¿En qué se diferencia su servicio del Stadia de Google?

JP: Es importante entender que Stadia parece dirigirse primariamente al núcleo duro de jugadores, que ya juega con PC y consola. En cambio, PlayGiga apunta al segmento de familia / mercado de masas, mediante una estrategia B2B2C que se desarrolla en colaboración con operadoras y firmas especializadas en multimedia.

Stadia ha anunciado que ofrecerá soporte para 4K y 60 fps, lo que conlleva un alto costo y no es idóneo para el mercado de masas. Al parecer, también requiere una conexión a Internet de 15 a 25 Mb/s, que excluirá a millones de jugadores que utilizan conexiones más lentas.

Además, ofrece su propio estudio y kit de desarrollo de software para desarrolladores, por lo que más bien parece que se trate de una nueva plataforma de juegos, y no solo de un servicio de streaming. Por todo ello, pienso que competirá más bien con las firmas que ofrecen PC virtuales alojados en la nube. También podría suponer un desafío para los propietarios de grandes plataformas como Microsoft y Sony, sobre todo si Google empieza a competir con ellos en la creación de una cartera amplia de propiedad intelectual.

Es estupendo que los juegos en la nube susciten tanto interés, pero en lo que a nosotros respecta todo sigue igual. Seguimos trabajando en el mercado familiar y de masas a través de las operadoras de telecomunicaciones, con una clientela de abonados cada vez más numerosa a la que podrán ofrecer un servicio digital nuevo y atractivo, pensado para un uso muy frecuente.

Hace poco anunciaron una alianza con Ooredoo Qatar. ¿Tienen otros acuerdos con operadoras en preparación?

JP: Hemos entablado conversaciones con más de 60 firmas de todo el mundo y dicho número crece todos los meses.

¿Qué se puede esperar de PlayGiga en 2019?

JP: Queremos seguir invirtiendo en tecnología. Con ese fin, deberemos cooperar con varios laboratorios de I+D en Europa y los Estados Unidos, y al mismo tiempo ampliar nuestro catálogo y llevar el negocio a nuevos mercados.

El nuevo modelo de negocio fundamentado en el streaming contribuirá a transformar el mercado de juegos en un sentido que favorecerá a usuarios finales, editores y desarrolladores.