Donald Trump (en la foto) ha apuntado la posibilidad de suavizar las sanciones contra Huawei y ha insinuado que el estatus de dicha firma podría mejorar en el marco de un acuerdo comercial más amplio entre Estados Unidos y China.

Trump ha tratado la cuestión de Huawei en la Casa Blanca y ha insistido en que la empresa china supone un riesgo para la seguridad nacional de los Estados Unidos y es “muy peligrosa”, pero ha añadido que un acuerdo con China podría cambiar la situación.

El presidente ha afirmado que “si llegáramos a un trato, podría imaginar que Huawei figurara de algún modo o en alguna parte de él”.

Hace pocos días, el gobierno estadounidense agregó Huawei a una lista de empresas a las que no se permite adquirir componentes a las firmas del país norteamericano. Dicha prohibición podría tener graves consecuencias para la firma china.

Google y Arm –una firma especializada en el diseño de chips– son dos de las principales empresas que han anunciado que dejarán de colaborar con ella.

Huawei afirma que los temores de Estados Unidos de que sus productos se utilicen en labores de espionaje al servicio de la República Popular son infundados, y el propio Gobierno chino ha acusado a la Administración Trump de acosar sin motivo alguno a la firma.

Gao Feng, representante del Ministerio de Comercio de China, explica que “la mejor respuesta al acoso de los Estados Unidos es que las empresas chinas sigan fortaleciéndose”.

Huawei encuentra apoyos

Aparte de Google y Arm, un gigante de la electrónica como Panasonic también ha anunciado que dejará de suministrar ciertos componentes a Huawei.

Pero por otra parte, ha publicado en su sitio web una declaración con fecha de 23 de mayo en la que confirma que mantendrá el suministro normal de productos a la firma china.

Por su parte, Taiwan Semiconductor Manufacturing (TSMC), una empresa taiwanesa fabricante de chips, ha manifestado que puede seguir suministrando semiconductores a Huawei sin infringir las leyes estadounidenses.

Nikkei Asian Review informa de que TSMC, importante proveedor de Huawei, ha consultado a un bufete de abogados de Estados Unidos y ha concluido que puede suministrar chips a la empresa china sin transgredir las restricciones estadounidenses.