Sundar Pichai declara que las apuestas de Google en hardware, la nube y YouTube están dando resultados, porque el incremento de costes derivado de la estrategia de diversificación no ha impedido que la empresa matriz Alphabet conociera otro trimestre positivo.

La memoria trimestral de Alphabet correspondiente al cuarto trimestre del 2017 informa de un incremento del 24% en la facturación, que se situó en los 32.300 millones de dólares (unos 26.000 millones de euros). Una vez más, las ventas crecieron gracias al lucrativo negocio publicitario de Google, que generó 27.200 millones de dólares (unos 21.895 millones de euros) en ingresos, frente a los 22.400 millones de dólares (unos 18.000 millones de euros) del cuarto trimestre del 2016, mientras que los ingresos totales de Google alcanzaron los 31.900 millones de dólares (unos 25.680 millones de euros), con un incremento interanual del 24%.

Los beneficios de explotación de Google suman 8.800 millones de dólares (unos 7.000 millones de euros), frente a los 7.800 millones de dólares (unos 6.280 millones de euros) del trimestre equivalente de 2016. Los ingresos aportados por la división Other Bets (que comprende el Proyecto Loon, el fabricante de hardware Nest y la filial de automoción Waymo, entre otras unidades) ha crecido desde los 262 millones de dólares (unos 210 millones de euros) del cuarto trimestre de 2016 a los 409 millones de dólares (unos 329 millones de euros) de este último trimestre. Las pérdidas operativas de la división han descendido de 1.100 millones de dólares (unos 885 millones de euros) a 916 millones de dólares (unos 737 millones de euros).

Alphabet, tomada en su conjunto, perdió 3.000 millones de dólares (unos 2.414 millones de euros) en el cuarto trimestre de 2017. Según la empresa, se debe sobre todo a un pago único de 9.900 millones de dólares (unos 7.970 millones de euros) debido a las reformas fiscales en los Estados

Unidos, que han incrementado la carga impositiva sobre buena parte de las corporaciones del país durante dicho período. De no haberse producido la reforma, Alphabet habría registrado unos beneficios netos de 6.800 millones de dólares (unos 5.472 millones de euros), frente a los 5.300 millones de dólares (unos 4.265 millones de euros) del cuarto trimestre de 2016.

Tres grandes apuestas

Pichai ha declarado en una teleconferencia sobre resultados que las inversiones en la nube, YouTube y hardware, así como su interés por orientar sus actividades empresariales hacia la inteligencia artificial (IA), son cruciales para su estrategia a largo plazo.

Así, por ejemplo, ha revelado que Google Cloud, que incluye la gama G-Suite de servicios para empresas, ha alcanzado una “escala significativa” y ahora mismo es un negocio que genera 1.000 millones de dólares (unos 800 millones de euros) cada trimestre. El número de contratos cuyo valor supera el millón de dólares entre los productos de nube se ha triplicado con creces entre 2016 y 2017.

Pichai también ha hablado del incremento del número de personas que ven YouTube en el televisor, y de que las ventas de sus productos de hardware “se han duplicado con creces” en el cuarto trimestre de 2017 respecto al período equivalente del año anterior.

Pero su interés en diversificarse y disminuir su dependencia respecto a las búsquedas y la publicidad en teléfonos móviles han tenido un precio: los márgenes de beneficio de Alphabet se han visto notablemente aminorados por el crecimiento de los costes asociados a la promoción de las tres áreas, así como por el incremento de los costes por adquisición de tráfico.

Los costes y gastos totales del período se han elevado en un 24% hasta alcanzar los 24.700 millones de dólares (unos 19.880 millones de euros), y el coste total de los costes por adquisición de tráfico (el dinero que Google abona a sus socios por publicar sus anuncios) se ha incrementado en un 33% hasta alcanzar los 6.500 millones de dólares (unos 5.230 millones de euros).

Durante el mismo período, Google ha invertido grandes esfuerzos en promocionar su smartphone Pixel 2 y su canal YouTube TV, a la vez que reducía los precios del hardware. Google también ha efectuado un gasto considerable para que su buscador sea la opción por omisión en los dispositivos de otras marcas, como el iPhone de Apple.

A propósito del incremento en los costes por adquisición de tráfico, Ruth Porat, directora financiera de Alphabet, afirma que esperaba que los costes previos al primer trimestre de 2018 fueran más altos, y explica que el período navideño ha tenido como resultado un incremento de los pagos a socios durante el cuarto trimestre de 2017.

También reitera que los costes no resultan preocupantes, porque reflejan “el impulso actual” de la transición a los dispositivos móviles.