Ren Zhengfei (en la foto), fundador de Huawei, ha pedido a los empleados de Honor que hagan de dicha submarca uno de los principales competidores en el mercado del smartphone, al tiempo que la empresa matriz se desprende de ella como consecuencia de las sanciones estadounidenses.

Según Reuters, Ren ha afirmado en un foro para empleados de Huawei que quiere ver a Honor como principal competidora de la firma matriz una vez se consume el “divorcio” entre ambas empresas, y que a partir de ahora “el eslogan que motive” a Honor tendrá que ser el imperativo de derribar a Huawei de su pedestal.

La empresa confirmó durante el mes de noviembre que planeaba vender todos sus activos empresariales en Honor al consorcio chino Shenzhen Zhixin New Information Technology Co., y señaló a las sanciones estadounidenses como causantes.

El fabricante explicó entonces que la filial de smartphones se hallaba “bajo una tremenda presión, debido a la persistente falta de disponibilidad de elementos técnicos necesarios para nuestro negocio de telefonía móvil”.

Durante el discurso, Ren Zhengfei ha señalado a Estados Unidos como nación que lidera una campaña mundial contra Huawei y calumnia a la firma al acusarla de constituir una amenaza contra la seguridad.

Huawei ha negado una y otra vez que utilice su equipamiento para espiar al servicio de la República Popular China.

El directivo afirma que “las sucesivas oleadas de sanciones estadounidenses contra Huawei nos han llevado a comprender, por fin, que ciertos políticos de ese país no quieren corregirnos, sino borrarnos del mapa”.

Añade que Huawei superará las dificultades, pero que ha decidido vender Honor, porque millones de empleados y distribuidores perderían sus puestos de trabajo si la firma se quedara sin sus canales de venta.

Honor tendrá que llevar a cabo grandes esfuerzos si de verdad quiere superar a Huawei.

Según las cifras aportadas por Canalys, los smartphones de Honor representan el 26% de los 51,7 millones de teléfonos que Huawei despachó durante el tercer trimestre.