Mauricio Ramos (en la foto), consejero delegado de Millicom, ha dedicado su ponencia en el MWC22 sobre creación de valor a explicar explicado cómo es posible que una operadora como la que dirige haya desarrollado un negocio sostenible en un contexto en que los ingresos medios por usuario rondan los 5 dólares (aprox. 4,5 euros) al mes.

Ha explicado que su firma solo puede alcanzar el éxito mediante “un modelo muy eficiente en materia de costes” cuyo objetivo principal es ofrecer una excelente conectividad móvil y fija.

En su opinión, una operadora que trabaja en mercados como los de Millicom en América Latina debe contar con tres factores esenciales: centrarse en la red, tener muy en cuenta al cliente y buscar la convergencia.

Ha explicado que “la magia empieza en la red”, puesto que una conectividad fiable es lo que permite conservar los clientes y crea lealtad para con la marca. Además, “para no convertirse en una red tonta hay que empezar por disponer de una red muy, muy buena”. La “fórmula secreta” que permite ofrecer la mejor de las redes consiste en lograr que los bits que circulan por ella, y que el cliente consume, se sitúen en el coste de producción más bajo posible.

Ramos indica que Millicom ha captado tres nuevos millones de clientes de telefonía móvil y 700.000 clientes residenciales durante la pandemia de Covid-19, gracias a haberse centrado en la construcción de redes de última generación.

Según Ramos, al convertirse en red favorita y atraer a clientes y socios de valor añadido ha allanado el camino para asumir el papel de habilitador de servicios digitales. Se ha referido al monedero digital Tigo Money de Millicom como ejemplo de servicio digital de valor añadido.

En sus propias palabras, “creo que así es como hallamos nuestro lugar en el ecosistema en tanto que empresa de telecomunicaciones. Desempeñamos tres importantes papeles: socio, distribuidor e innovador.”