En el año 2023, las inversiones de capital en telecomunicaciones experimentaron una disminución global, según datos preliminares presentados por Dell’Oro Group. Este declive se atribuye en parte a la reducción de las inversiones en tecnología 5G por parte de las operadoras, marcando así la primera contracción del mercado desde 2017.
Según la firma de analistas, la proporción de inversiones relacionadas con la 5G alcanzó su punto máximo en 2022, representando un 18%, y se espera que disminuya hasta aproximadamente un 15% para el año 2026.
Los pronósticos sugieren que la inversión de capital a nivel mundial podría disminuir en torno al 5% en 2024, con una tasa de crecimiento anual compuesta negativa del 2-3% hasta 2026.
Stefan Pongratz, vicepresidente de Dell’Oro Group, menciona que las operadoras se enfrentan a presupuestos fijos de inversión de capital, y que estas inversiones están mayormente limitadas por el flujo de ingresos. A pesar de ello, señala que “el pastel de los ingresos se mantiene fijo”.
Sin embargo, el crecimiento de los ingresos de las operadoras se ha estancado en gran medida durante la última década, y las perspectivas no muestran un gran optimismo respecto a las nuevas oportunidades tecnológicas como la inteligencia artificial (IA) generativa, la computación en el borde, la 5G empresarial, el acceso inalámbrico fijo (FWA) y la 5G Avanzada.
Pongratz también ha declarado a Mobile World Live que las inversiones de capital en tecnología móvil disminuyeron en un solo dígito en 2023, y se espera que las condiciones sigan siendo desafiantes en 2024, con una reducción de casi el 15% en las inversiones de capital en tecnología inalámbrica en Estados Unidos.
Sin embargo, se prevé que los ingresos de las operadoras aumenten a una tasa de crecimiento anual compuesta del 1% en los próximos tres años.
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