El gobierno chino ha intensificado las medidas encaminadas a reducir el tiempo que los niños pasan frente a la pantalla y combatir la adicción a los juegos. Así, ha prohibido a los menores de edad jugar en red por las noches de lunes a jueves y ha limitado los juegos a un total de tres horas en los fines de semana.

En una declaración traducida, publicada originalmente el 30 de agosto, la Administración Nacional de Prensa y Publicaciones informa de que las empresas de juegos por internet podrán permitir a los menores de 18 años “tan solo una hora de servicios de juego en red los viernes, sábados, domingos y días festivos oficiales, de las 20:00 a las 21:00 horas”.

Dicho organismo declara que el uso excesivo de juegos por parte de niños “es un problema importante, que afecta negativamente a la vida cotidiana, el aprendizaje y un crecimiento saludable”.

Las nuevas normas entran en vigor el 1 de setiembre, día en el que empieza el curso escolar. La Administración mencionada exige que los jugadores en red se conecten a su sistema de verificación de nombres reales, destinado a la lucha contra la adicción a los juegos.

Todos los jugadores tienen que utilizar información de identidad válida para registrarse en las cuentas de juego e iniciar sesión.

Las empresas de juegos no pueden proporcionar ningún servicio, ni siquiera en modo de experiencia para visitantes, a los usuarios que no se hayan registrado e iniciado sesión con sus nombres reales.

En noviembre de 2019, el gobierno ya impuso límites al acceso a los juegos en red por parte de menores de 18 años, en un intento por reducir la adicción.

En mayo, una asociación de interés público china denunció a Tencent, una de las principales firmas de juegos del país, por entender que esta había transgredido los límites estipulados.

Durante los últimos diez meses, el gobierno chino ha reforzado la vigilancia sobre las empresas tecnológicas nacionales y ha introducido normas más estrictas en materia de competencia, privacidad del usuario y uso infantil.