El consejo de administración de BlackBerry rechazó vender la empresa por partes, aunque firmas de la talla de Apple y Microsoft presentaron ofertas tentadoras, según informa Reuters.

La empresa ha rechazado a postores interesados en adquirir partes de su negocio, y considera que hacerlo favorece sus intereses generales, que abarcan a empleados, clientes y proveedores.

Fuentes del sector aseguran que tanto Apple como Microsoft han expresado interés adquirir patentes de BlackBerry.

También se ha negociado con otras firmas como Cisco, Google y Lenovo sobre la venta de la totalidad o partes de la empresa.

En lugar de vender, el consejo de BlackBerry optó la semana pasada por aceptar una inyección de capital de 1.000 millones de dólares por parte de su principal inversor Fairfax Financial y otros aliados. Sin embargo, inicialmente se esperaba que Fairfax hiciera una oferta en firme para comprar directamente toda la compañía.

Al mismo tiempo, se anunció que el consejero delegado Thorsten Heins ha sido sustituido provisionalmente por John Chen (en la foto), ex presidente y consejero delegado de Sybase.

Se han ido conociendo más detalles sobre la remuneración de Chen. Según un documento presentado por BlackBerry ante el organismo regulador, el nuevo consejero delegado y presidente ejecutivo en funciones tendrá un salario base de un millón de dólares al año, más una bonificación de hasta dos millones más.

No obstante, también se le han concedido 13 millones de acciones restringidas, cuyo valor aproximado asciende a unos 85 millones de dólares y podrá ejecutar durante los cinco próximos años. Por lo tanto, el fichaje de Chen cuesta un total de 88 millones de dólares.

El documento presentado contiene también el desglose de las empresas de inversión que acompañan a Fairfax en la inyección de 1.000 millones de dólares en efectivo.

Además de los 250 millones de dólares que aporta Fairfax, el principal inversor es el Canso Investment Council de Canadá, con 300 millones. Mackenzie Financial pone 200 millones, Qatar Holding y Markel aportan 100 millones cada uno, y Brookfield contribuye con 50 millones.

BlackBerry ha considerado que emitir bonos convertibles ofrece más seguridad que una ruptura, que connlevaría más riesgos. En caso de romper la empresa, algunas de las actividades habrían sido cerradas, dando lugar a responsabilidades de cara, por ejemplo, a los proveedores, que deberían ser asumidas con los ingresos obtenidos con la venta de patentes.

Además, muchos de los activos de BlackBerry están tan vinculados entre sí que separarlos habría disminuido su valor.

Por último, cualquier acuerdo con una empresa extranjera habría topado con un análisis en profundidad por parte del gobierno de Canadá, un aspecto que al parecer echó por tierra las posibilidades de alcanzar un acuerdo con la firma china Lenovo.