Los analistas ya esperaban este iPhone SE renovado para plantar cara a las marcas de teléfonos Android que ofrecen prestaciones de gama alta a niveles de precio medio-bajo en un momento en que los consumidores están especialmente atentos a los precios debido a la pandemia global de la Covid-19.

El nuevo dispositivo de Apple mantiene el diseño físico del iPhone 8 al que sustituye en el catálogo de Apple, con una pantalla de 4,7 pulgadas, botón físico de inicio con lector dactilar TouchID y carcasa de aluminio con los cantos y esquinas redondeados. Sin embargo, su procesador mejora considerablemente el del iPhone 8, ya que se trata del chip A13 Bionic, el mismo que Apple utiliza en la serie iPhone 11.

Aunque cuenta con una sola cámara trasera de 12 megapíxels (mpx), Apple afirma que el nuevo chip del iPhone SE permite fotografía HDR avanzada y grabación de video 4K.

El teléfono está disponible con 64, 128 o 256 gigabytes de almacenamiento; cuenta con una cámara frontal de 7 mpx para selfies; función de carga inalámbrica; capacidad para dos tarjetas SIM; y compatibilidad con Apple Pay y Wi-Fi 6. Las opciones de color son tres: negro, blanco y rojo.

El nuevo iPhone SE estará disponible 40 países a partir del 24 de abril, con un precio de 489 euros para el modelo de 64 GB, 539 € para el de 128 GB y 659 € el de 256 GB).

Ben Wood, jefe de investigación de CCS Insight, opina que el diseño renovado tiene el potencial de “impulsar la próxima ola de adopción” de dispositivos Apple, con un precio que “no solo desafiará las ventas de nuevos teléfonos inteligentes Android, sino que también puede afectar a las empresas que restauran y revenden iPhones de segunda mano ”.

Wood agrega que el dispositivo también viene a ofrecer una opción de iPhone más asequible en un momento en que a los consumidores afectados por la pandemia de Covid-19 “les costaría justificar un gasto de 1.000 euros o más en uno de los dispositivos emblemáticos de Apple”.