La Comisión Europea ha aprobado la compra de la empresa norteamericana Beats de auriculares y streaming de música por parte de Apple, operación valorada en 3.000 millones de dólares. La compra fue anunciada a finales de mayo, y con ella Apple aspira a ganar terreno en el creciente y lucrativo mercado de la música en streaming. La Comisión Europea informó en junio que decidiría antes del 30 de julio si daba luz verde a Apple para comprar Beats.

 

Aunque Apple también vende auriculares en el Área Económica Europea (AEE), la Comisión ha dictaminado que la fusión entre las dos empresas no plantea problemas de competencia, debido a su baja cuota de mercado combinada. Además, los auriculares que vende cada marca son “marcadamente distintos en funcionalidad y diseño”, y tras la fusión seguirá habiendo un buen número de competidores, como Sony, Sennheiser y Bose.

 

Apple y Beats también se dedican a la distribución digital de música. Los servicios iTunes de Apple ofrecen descargas de canciones, mientras que Beats Music está centrada en el streaming. No obstante, Beats Music no está disponible en el AEE, y dado que en la región sí están Spotify y Deezer para competir con Apple, la Comisión considera que la fusión no tendrá efectos negativos sobre la competencia. También se afirma que la operación “no proporcionará a Apple la posibilidad ni el incentivo para dejar fuera de iOS a los servicios de streaming rivales”. Para ello se basa en que Apple ya lleva a cabo distribución de música, de modo que la fusión no modificará su interés en bloquear dicho acceso.

 

Beats Electronics fue fundada en 2008 por Jimmy Iovine y André Young (Dr Dre) para fabricar auriculares y altavoces, y en 2013 nació Beats Music, que ofrece servicios de música en streaming en los EEUU y Australia, en régimen de suscripción.

 

El acuerdo de compra contempla la incorporación de los cofundadores de Beats a Apple. 2.600 millones del precio de venta serán abonados de inmediato, y los 400 millones restantes vencerán al cabo de un tiempo.

 

HTC, el fabricante taiwanés de terminales, había poseído una participación significativa en Beats, cuya marca figuraba de modo muy visible en sus smartphones de gama alta. Pero la empresa vendió el año pasado toda su participación en Beats.

 

La semana pasada, Beats Electronics fue demandada por Bose, otro fabricante de auriculares, por infringir patentes relativas a su tecnología de reducción activa de ruido, y afectar con ello a sus ventas. La acción legal de Bose se produce justo antes de la aprobación de Europa, lo que podría llevar a Beats a zanjar rápidamente el asunto para evitar cualquier incertidumbre legal que pueda poner en entredicho la operación en curso con Apple.