La tienda Play de Google superará a la App Store de Apple en términos de facturación en 2016, tras haberla superado en cantidad de descargas en 2012. Se trata de un pronóstico de Strategy Analytics, cuyo director ejecutivo de investigación de aplicaciones, David MacQueen, afirma que “la ambición de Google de impulsar Android -y por lo tanto Google Play- como plataforma que abarque todos los dispositivos conectados (teléfonos, tabletas, ponibles y en el automóvil) incrementará las oportunidades de que la facturación de Google Play crezca para acabar superando a la de Apple en 2016”.

 

Las compras integradas en las aplicaciones generarán la mayor parte del gasto, que se espera que continúe, aunque también se advierte que “existe el riesgo de que un exceso de regulación llegue a cambiar el panorama del mercado”.

 

Entretanto, el precio medio de venta de las aplicaciones de pago ha aumentado desde los 2,07 dólares de 2010 hasta los 2,69 dólares del año pasado (1,55 y 2,01 euros, respectivamente). “En pocas palabras, el mercado está ahora dividido entre las aplicaciones ‘freemium’ y las de pago, mientras que los títulos a 0,99 están quedando desplazados”, continúa MacQueen.

 

Strategy Analytics también afirma que Apple y Google están invirtiendo fuertemente en “reforzar sus preciados ecosistemas de contenido y aplicaciones”. Apple y Google “dominan las adquisiciones tanto en importe como en número, y también lideran el desarrollo de las nuevas oportunidades de mercado surgidas de la sala de estar multipantalla y el hogar conectado”, indica Ahmed Mostafa, consultor asociado.

 

Strategy Analytics también destaca que la Appstore de Amazon y la Windows Phone Store de Microsoft han registrado un fuerte crecimiento, “aunque siguen estando eclipsadas por Apple y Google”. “La experiencia comercial de Amazon y el creciente parque instalado de Windows Phone son los motores principales de este crecimiento” según Adam Thorwart, investigador asociado del programa de oportunidades del ecosistema de aplicaciones de Strategy Analytics. No obstante, Microsoft tiene que resolver algunos defectos de su ecosistema: si bien la empresa no reparó en gastos al comprar la división de Dispositivos y Servicios de Nokia, la falta de inversiones en mejorar su ecosistema de aplicaciones y contenido constituye “una alarma que indica falta de dedicación a un elemento tan importante de su futuro en los móviles”.