La firma Pony.ai de tecnologías de conducción autónoma ha elegido una plataforma compatible de Nvidia para una flota de vehículos provistos de autoconducción, y afirma que dicha tecnología permitirá la producción en masa de vehículos sin conductor.
Pony.ai ha adoptado el chip Drive Orin de Nvidia en la sexta generación de su sistema de conducción autónoma, que afirma es compatible con el Nivel 4 de autonomía. Nvidia indica en su blog que dicho chip puede procesar 254 billones de operaciones por segundo.
James Peng, cofundador y consejero delegado de Pony.ai, considera que la plataforma de Nvidia permitirá la producción en masa “a una escala sin precedentes”.
Pony.ai explica que probará su sistema en el vehículo S-AM de Toyota por carreteras públicas de China a lo largo de 2022 y lo desplegará en sus operaciones de robotaxi en el primer semestre de 2023.
Por su parte, Nvidia ha destaca en su blog que los vehículos estarán provistos de unidades de señalización instaladas en el techo.
Los coches provistos de autoconducción de Nivel 4 pueden responder también a los conductores humanos. Lo más habitual es que se les permita funcionar dentro de zonas reguladas específicamente.
Pony.ai ha llevado a cabo pruebas de su tecnología en China y California, si bien The Verge informó en diciembre que esta última ha suspendido las pruebas a causa de una colisión.
Nvidia no es el único fabricante de chips que busca estar presente en el mercado de vehículos autónomos: tanto Qualcomm como Intel también están efectuando fuertes inversiones en dicha tecnología.
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