Un informe de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) afirma que más de la mitad de la población mundial puede acceder ya a conectividad LTE, pues las redes compatibles con esta tecnología ya abarcan casi 4.000 millones de personas.

El estudio Facts and Figures de la UIT indica que el 53% de las personas disponen de acceso a LTE, mientras que los servicios básicos de móvil (las redes 2G) ofrecen una cobertura prácticamente ubicua, del 95%. Por su parte, las redes que ofrecen cobertura 3G o superior alcanzan al 84% de la población mundial, pero únicamente al 67% de las zonas rurales.

El aumento de la accesibilidad significará un incremento del número total de líneas de banda ancha móvil en servicio a finales de este año, que pasará de 3.200 a 3.600 millones según el informe.

Dicho crecimiento también podría deberse al precio, puesto que una tarifa promedio de banda ancha fija básica cuesta más del doble que un servicio comparable de banda ancha móvil. En cambio, en los “países menos desarrollados” (según la clasificación de la ONU atendiendo a los niveles de pobreza, recursos humanos y vulnerabilidad económica) los servicios de banda ancha fija son en promedio el triple de caros que los de banda ancha móvil.

Los abonos a servicios de internet móvil en los países en vías de desarrollo continúan mostrando crecimiento y ya registran una penetración del 41%, pero el organismo internacional advierte que el crecimiento de este indicador está frenando. Los países desarrollados muestran una penetración del 90,3%, mentras que el conjunto del mundo ronda el 50%.

Sin embargo, unos 3.900 millones de personas, más de la mitad de la población mundial, seguirán a final de este año sin utilizar ningún tipo de acceso a internet: el informe añade que la penetración de internet alcanzará el 81% en los países desarrollados, el 40% en los que están en vías de desarrollo y sólo el 15% en los “menos desarrollados”.