América Móvil reconoce haber sido informada por el nuevo regulador de comunicaciones de México –el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT)– de que deberá afrontar una investigación sobre el dominio que ejerce en el mercado, como parte de los planes del gobierno a la hora de reformar el sector de telecomunicaciones del país. Dada la extraordinaria supremacía del operador en el ámbito de telefonía móvil de México (su cuota de mercado ronda el 70%), la noticia no resulta en absoluto sorprendente. América Móvil esperaba, y así lo había hecho saber, que el regulador la declararía dominante.

 

La investigación se centrará tanto en su área de telefonía móvil (RadioMóvil Dipsa), como en el negocio de telefonía fija (Teléfonos de México).

 

En este orden de cosas, también Televisa, la mayor empresa audiovisual ​​del país, ha confirmado estar siendo investigada a fin de conocer su verdadero poder en el mercado de la televisión mejicana.

 

América Móvil dijo haber recibido una notificación por parte del regulador, “al respecto de la apertura de una investigación sobre su supuesta consideración como «actor económico preponderante» en el mercado de las telecomunicaciones en México, y la posible imposición de medidas reglamentarias”. En esta etapa inicial del proceso, el regulador ha solicitado a América Móvil información sobre el mercado.

 

El IFT dispone hasta el 9 de marzo para determinar qué participantes dominan los mercados de telecomunicaciones y televisión, y aplicar, en consecuencia, medidas que los hagan más competitivos.

 

Las posibles soluciones a la situación podrían pasar por una mayor regulación de América Móvil con respecto a sus rivales; por ejemplo, aplicándole unas tarifas de terminación más altas. También podría ser obligada a desagregar su red. Incluso podría ser obligada a vender activos si las demás medidas no son consideradas suficientes.